Con una alimentación sana y equilibrada, la ingesta de abundante líquido y una rutina de ejercicios diaria, todo esto se hubiera evitado. Sin embargo ahora en septiembre, y como cada año, comienzan los lamentos y arrepentimientos. Pero no te preocupes, ¡hay solución! Una buena tabla de ejercicios, además de una dieta equilibrada, lograrán ponerte a tono en muy poco tiempo. ¿Las claves? Disciplina y constancia.
Ejercicio progresivoDe nada sirve, después de haber estado todo el verano sin hacer nada, que ahora te vuelvas loca corriendo o saltando. Lo único que conseguirás será desconcertar a tu cuerpo acostumbrado a hacer "nada".
Lo mejor es que comiences con un programa de ejercicios adecuado a la actividad que hallas realizado este verano. Después ves aumentando su intensidad, según el cuerpo se vaya acostumbrando. Si eres de las que se han mantenido activas este verano, no te resultará difícil volver a coger la rutina del deporte. Pero si te has sometido a un estado de inactividad vegetativa, comienza con un programa más lento para que tu organismo no se resienta tanto.
Y es que la efectividad del ejercicio no se basa tanto en la intensidad, como en la constancia. Se quema más grasa haciendo bicicleta, natación, gimnasia aeróbica o incluso andar todos los días durante media hora, que hacerlo una vez por semana durante dos horas.
